ERGONOMÍA LABORAL: QUÉ ES Y CÓMO APLICARLA
El cuidado de la postura y la ergonomía en los puestos de trabajo puede prevenir enfermedades y lesiones corporales. La ergonomía laboral se encarga de optimizar la interacción hombre-máquina-ambiente, adaptando las condiciones de trabajo a las características físicas y mentales de los colaboradores con el objetivo de proporcionar bienestar y seguridad.
Ahora bien, ¿cómo identificar si necesitamos mejorar nuestro espacio de trabajo? En realidad, es bastante simple, si sentimos malestar en alguna de estas partes del cuerpo: cuello, hombros, codos, muñecas, espalda, necesitamos mejorar el espacio en el que trabajamos.
¿Qué factores debemos observar?
La presencia de posturas forzadas
Los movimientos repetitivos en manos y codos
La manipulación de cargas pesadas
La exposición a vibraciones
Todos estos son factores de riesgo ergonómico que producen trastornos musculoesqueléticos. La ergonomía laboral puede ayudarnos a prevenir enfermedades, mejorar el desempeño e incrementar la productividad.
Aspectos a tener cuenta para evitar lesiones en el trabajo
Para prevenir lesiones en el trabajo y mejorar la calidad de vida laboral tené en cuenta estos consejos:
• Ajustá la mesa de trabajo
Tu mesa de trabajo debe estar a la altura adecuada, esto garantiza que la posición corporal esté bien balanceada. Esta adaptación debe estar organizada de una forma eficaz, con suficiente espacio para que te muevas alrededor y variar la posición cada determinado tiempo.
Si estás mucho tiempo sentado, procurá que la silla sea cómoda y ergonómica. Si trabajás con la computadora, asegurate de que el monitor esté a la altura adecuada: la parte superior de la pantalla debe quedar a la altura de tu línea horizontal de visión.
• Evitá estar en una misma posición durante mucho tiempo
Mantener una misma posición en largos periodos de tiempo puede generar trastornos musculoesqueléticos. Es importante realizar, cada 30 minutos aproximadamente, estiramientos y cambios de postura.
Una buena opción son las pausas activas. Cada 30 o 45 minutos tomate un recreo de 5 o 10 minutos para caminar, estirarte, hacer yoga. ¡Hay muchas aplicaciones que te pueden ayudar a generar el hábito!
• Procurá tener una buena iluminación
La iluminación es un factor clave. Cuando el espacio no está iluminado adecuadamente la vista se cansa con mayor facilidad y esto puede generar afecciones visuales. Siempre la mejor opción es la iluminación natural.
• Ambiente acústico
Si tu ambiente de trabajo es ruidoso, tenés que usar las protecciones auditivas apropiadas.
Cuidarnos y tener una buena calidad de vida, depende en gran medida de nosotros. Todos estos, son pequeños hábitos ¡que pueden mejorar tu día a día!