Empezaron las clases: cómo mantener una alimentación saludable
Comienza el ciclo lectivo y vuelve la misma disyuntiva de todos los años, ¿cómo hacer para que los más pequeños de casa mantengan una alimentación saludable mientras están en el colegio? Todos en algún momento estuvimos en su lugar, y resulta que no es para nada tentador comer una manzana mientras el compañero de al lado tiene para merendar las galletitas de moda del momento.
Resulta que, sobre que ya es complejo regular lo que comen los niños cuando están en casa, al estar en el colegio el “control” sobre lo que consumen queda un poco librado al azar. Los quioscos de las escuelas suelen tener una gran variedad de golosinas, galletitas y snacks, haciendo que sean los más demandados por los niños; sin embargo, estos alimentos presentan un perfil nutricional insuficiente, ya que suelen tener bajo contenido proteico y una gran concentración de sodio y azúcares.
A continuación 3 tips que te ayudarán a mantener una alimentación saludable para los más pequeños de la casa:
La primera comida del día, la más importante. Un buen desayuno es crucial para que el cuerpo cuente con la energía necesaria para afrontar el día. La primera comida del día debe incluir lácteos, cereales y frutas. Así que ya sabés, antes de que salgan de casa, asegurate de que hayan comido bien. A veces, se trata de una comida a la que le restamos importancia porque el trajín del día hace que tengamos poco tiempo para prepararnos, pero no lo olvides, levantarse unos minutos antes para que los más chicos de la casa tengan un buen desayuno es tan importante como dormir la cantidad de horas adecuadas y llegar a horario al colegio.
No dejar la elección librada a los niños. Cuando los más peques empiezan a crecer se vuelve muy tentador darles dinero para que resuelvan la merienda en el quiosco del colegio. Sin embargo, es muy loable, por más que hagamos hincapié en la importancia de la buena alimentación, que caigan en la tentación de comprar galletitas o snacks con pobres propiedades nutricionales. A demás, hay que tener en cuenta que en los quioscos no suele haber opciones saludables como frutas o yogures. La mejor elección es siempre planificar y tomarse el tiempo de armar una vianda. De esta forma nos aseguramos que consuman alimentos en variedad y calidad.
Armá la vianda. Como siempre lo decimos en este blog, el equilibrio lo es todo. No es necesario ser fatalistas y prohibir determinados alimentos porque, seamos realistas, todos sabemos que no son buenos nutricionalmente, pero que tienen un sabor especial. Una buena opción es armar una vianda con un poco de todo. Pensá en esos tuppers que vienen con compartimentos, un poco de fruta cortada (para que no haya excusas), unos cereales y un par de galletitas de esas que tanto le gustan. La clave está en la variedad.
Es importante tener en cuenta que el primer desafío está en manos de los padres, que desde casa debemos realizar un trabajo de educación y concientización sobre las opciones más saludables para comer. Una alimentación saludable se traduce en un cuerpo con energía para realizar todas las actividades del día.